Los shows informativos están de moda. Casi cada una de las cadenas de televisión tienen uno, y la verdad, me alegro.
Bueno, me explico. Noche Hache, El intermedio, Buenafuente, Caiga quien Caiga, Se lo que hicisteis…, el desaparecido Informal… y alguno que otro de el que ya no me acuerdo se encargan de “informarnos” de una manera cómica y a veces sincera de las desavenencias de éste país.
Por si no teníamos bastante con las “clausuras” y manipulaciones de los informativos y las cadenas de televisión por cada uno de los gobiernos que manejan éste país, le añadimos las escandalosas, costosas y engañosas campañas electorales de los partidos que prometen convertir a nuestra España en el nuevo Jardín del Eden… aunque aún haya gente que se lo crea (sobre todo los que comen de éste mundo, o sea, los enchufados políticamente hablando).
No hay cosa que más coraje me dé que hablar de política a éstas horas de la noche, aunque sea con mi portátil, pero es que las elecciones ya están aquí y toca hablar de éste tema.
Para mi, éstos shows informativos son una pequeña esperanza de lo que los ciudadanos esperamos, en cuanto información se refiere, sobre el estado de ésta “democracia” ya que no tienen reparo en poner a parir a “to” dios.
Los guiñoles de Canal + son el mejor ejemplo.
Muñecos caricaturizados y manipulados para hacer reír a la gente que, y es solo mi opinión, son los únicos que ven la realidad y que además la interpretan de la forma en la que están sucediendo las cosas.
Y ustedes dirán.. “Pero como le puedes dar importancia a la narración de unos muñecos y no dársela a los presentadores de verdad?” Pero es que, para mí, los muñecos son en realidad los políticos y sus zagales que manipulan los medios con fines políticos y electorales (y si no que se lo pregunten a Aceves que sigue pensando que los autores del 11-M fue E.T.A por no perder unas elecciones)
Prácticamente es lo único que veo en televisión, aparte de algún que otro dibujo animado ya que éstos últimos por lo menos no especulan con las audiencias ni han fundado ningún partido político aún.
En resumidas cuentas, animo a todo el mundo a entender la política y los desastres de éste mundo y país a través de éstos cómicos y sinceros personajes que no se cortan un pelo en disfrazar a Aznar de Shakespeare o a Zapatero de Super héroe haciendo de sus ridículas funciones la realidad que todos vivimos día a día.
El día en que éstos shows informativos superen en audiencia al Telediario de la Primera o a las noticias de Antena 3 creo que empezarán los políticos a darse cuenta que en realidad los muñecos ridículos son ellos y que los ciudadanos de a pié entendemos las cosas como nos pasan, no como nos la quieren contar.
Una última propuesta para los productores de éstos Shows informativos, por si alguno no tiene nada que hacer y le da por leer esto, es que hagan un guiñól de Bush en los años 60 practicando el amor libre, fumando marihuana y promoviendo la paz en su Volswagen Carabell ya que es la única forma de ver una actuación de éste ser, aunque sea ficticia, sensata y coherente.
Dedico éste post a los creadores de tales majestuosas criaturas.
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